miércoles, 18 de diciembre de 2013

La exhibición

Siguiendo con el tema de la exhibición traigo este video de la Tv que ha levantado tanta polémica.




 El video está comentado por mi amiga Anastasia que opina lo siguiente:

"Como mujer y sumisa que nunca ha sido exhibida ni cedida, es más, habiendo siempre considerado esas prácticas un límite para mí, a petición de Master Rais visualizo el video e intento ponerme en la situación de esas mujeres, procurando imaginar lo que podría llegar a sentir. Lo primero que me viene a la mente es temor. Temor a ser juzgada, a ser valorada de una forma distinta a como yo me valoro ...o estoy acostumbrada a que lo hagan los demás, a sentirme humillada por lo que esas personas pudieran decir o pensar de mí, de mi cuerpo, de mi aspecto, de mis defectos. Temor a perder una seguridad en mí misma conseguida a lo largo de muchos años y mucho trabajo. Temor a verme despojada no solo de la ropa, sino de las defensas que he ido creando a lo largo de mi vida y me han servido para esconderme algunas veces, otras alejarme o incluso disfrazarme, pero siempre para protegerme. Creo que la primera situación mental a la que podría llevarme una experiencia así sería a la pérdida de control. Incluso desde mi posición sumisa, de algún modo, siempre intento mantener ese control, no sobre la situación por supuesto, pero sí sobre mi propia mente y el hecho de sentirme desprotegida bloquearía esa capacidad de controlarme, lo cual, inevitablemente me llevaría a otro tipo de temor, el temor a ser totalmente controlada y manipulada por otra mente, a ser despojada por completo de mi voluntad y capacidad de decisión, a ser incluso deshumanizada, para pasar a convertirme en un mero objeto, una marioneta en otras manos. Lo más curioso, quizás, es que cuando llego a este punto de la reflexión la mujer que hay dentro de mí se rebela, dice NO, no quiero vivir algo así, no estoy dispuesta a perder mi identidad. En cambio, y ahí viene lo curioso, soy perfectamente consciente de que al final ésa es, o debería ser, la auténtica esencia de la sumisión, la entrega en cuerpo, mente y alma sin condiciones y posiblemente, al menos en lo que a mí se refiere, sin atravesar un proceso de ese tipo nunca podría darse esa sumisión absoluta. La única duda estriba ahora en si sería capaz de reunir el valor suficiente para vivir el proceso, que de eso ya no estoy tan segura. En cualquier caso, gracias a esta reflexión me doy cuenta de que no se trataría de anular a la mujer, sino de apartar la parte de la mujer que no permite crecer a la sumisa y eso no se puede negar que es un gran reto, tanto para ella misma como para, por supuesto, su Amo."

 
 Gracias por tu comentario Anastasia. Aquí viene el video